DESIGN THINKING Y LOS MODELOS HIBRIDOS.
“Para que el sistema híbrido funcione, solicite la opinión de los empleados”, recomienda Sue Bingham en un artículo en la HBR hace pocos días. Habla de la capacidad de retener a los talentos simplemente poniendo en el centro durante todo el proceso valorando sus miradas y sobre todo necesidades. Puedes leerlo aquí!
https://lnkd.in/ddzqEqe
El año pasado trabajé con organizaciones en el diseño de los protocolos de vuelta al trabajo con #DesignThinking empatizando con aquellos que tenían el desafío de atravesar las ciudades para ocupar un lugar en su puesto, mientras que otros permanecían en casa. El trabajo esencial puso sobre la mesa una oportunidad de diseño para prepararnos para el futuro y algunas organizaciones lo vieron. En ese momento le llamamos: protocolos (aludiendo a las cuestiones de salud y cuidado y a ciertos estándares de bioseguridad que aún hoy son necesarias en espacios presenciales)
Estábamos en el confinamiento obligatorio producto de la pandemia y las condiciones definitivamente no eran las mismas que ahora. Muchos lo confundían con Home Office. ¿Esto era trabajar en casa? Por supuesto que no. Otros entendían que eso iba a evolucionar hacia lo que hoy llamamos: Lo Híbrido.
Son muchas las empresas que están buscando la mejor manera de capitalizar todo lo aprendido para generar un contexto de trabajo acorde, sostenible, que genere satisfacción, pertenencia y rentabilidad a los negocios. Y lo híbrido abre una ventana de oportunidad que cada vez más se empiezan a vislumbrar.
La definición de estas nuevas políticas que entran en el radar y con un sentido de importancia estratégica (y hasta de urgencia) es posible de hacerse con los colaboradores en el centro. El HCD (diseño centrado en las personas) tiene un marco metodológico que es el Design Thinking y que puede ayudar a darle forma a este diseño con un altísimo impacto, baja resistencia y con una declaración muy potente: “En esta organización lo haremos escuchando las necesidades de nuestros colaboradores”.
Creo que para el diseño de este proceso/política el uso del Design Thinking es realmente oportuno ya que promueve proyectos con significado y propósito; las soluciones son generadas en un ambiente creativo libre e inspirador desde dentro del ecosistema organizacional. Provee una mirada exploratoria, iterativa experimental que ayudará a estos primeros pasos. Los protagonistas son los mismos colaboradores que luego serán influecers de las decisiones que se tomen y ayudarán a ir incrementando el valor de estas decisiones en el correr de los días.
Aprovechar esta gran oportunidad tiene sentido para las organizaciones que están buscando que el área de personas sea ágil, inclusiva y que evolucione resonando con la complejidad en las que hoy se enmarcan sus propias prácticas como área y organizaciones.
¡Lo híbrido es un desafío de todos. Pongamos a los colaboradores en el centro!